Volvamos a empezar

Te echo de menos, eso es algo que no puedo quitarme de la cabeza. Tus labios en mi cuello es algo que añoro demasiado, tus manos en mi espalda y tu aliento sobre el mío es demasiado adictivo. Echo de menos mis raíces en tus huesos… ¿Qué pasó? No lo sé… Pero… Quiero intentarlo. ¿Por qué? Porque llega un momento en el que no sé quién soy sin ti, en el que no soy nada sin ti, y quiero volver a ser yo, quiero volver a ser la persona que conociste, la persona alegre y huidiza, la persona feliz que fui un simple día de invierno.

Otra vez el reloj se ha parado, otra vez… Y yo empiezo a sentirme pequeño... Como siempre colgado en un sueño… El sueño de quererte, dejar de ser inerte, de ser tu Robinson y de que tú seas mi Viernes, de ser el veterano, de estar condecorado en esta dura lucha que mantengo con tus labios… Volvamos a empezar.

(Muy Grande, Melendi...)