¿Razón o corazón?

No siempre puedes estar de acuerdo contigo misma, no siempre vale el sacar ventajas o inconvenientes en un papel sobre lo que sientes, sobre lo bueno y lo malo de alguien. Muchas veces, a pesar de ver todos los inconvenientes y todas las ventajas de un ser, de una persona querida, no puedes dejar de estar con ella aunque tenga más desventajas que ventajas, aunque no te convenga, porque sientes algo ahí, sientes algo ahí dentro del corazón cuando estás con él, a pesar de saber que no deberías hacerlo. Pero no siempre debes seguir a tu cabeza, no siempre debes pensar antes de actuar, hay momentos en los que es mejor lanzarte, decir lo que sientes, hacer lo que te apetece y después acarrear con las consecuencias, porque hay momentos en los que es mejor actuar, ya que si pensaras no actuarías de cierta manera, y habrían muchas cosas de las que podrías arrepentirte de no haber hecho. Porque a pesar de que el corazón es un órgano que no piensa, sabe cómo actuar, y sabe lo que necesitas para poder llegar a ser feliz. Porque nuestros sentimientos más importantes son los que contradicen a nuestros pensamientos. El dilema viene ahora: ¿a quién debo hacerle caso? Que cada uno decida por sí mismo.